Parece ser que el hombre ha tomado experiencia en la creación de conflictos, y señalo este punto no porque sea algo malo, al contrario, los conflictos dentro de un sistema social en ocasiones hasta son necesarios, esto nos permite reconocer lo que podemos modificar o cambiar, además de que también permite un proceso de maduración en la comunicación entre personas.

 

El proceso de comunicación asertiva busca encontrar un punto de equilibrio partiendo del principio del respeto de los derechos. Es muy común que cuando surge un conflicto las personas eligen una posición de hacerse a un lado, guardar silencio, ceder a lo que los demás deciden, y en ocasiones, hay personas que permiten que otros los pisoteen.

 

Una persona que es capaz de utilizar una comunicación asertiva (parte de firmeza y seguridad interior),  reconoce el conflicto y cada una de las características que lo componen. Así será capaz de tomar una postura firme y desde un lugar en el que sabe si es viable negociar o no.

 

Rasgos del líder que se comunica con asertividad:

 

• Sensación de libertad al expresar sentimientos, deseos y pensamientos.

• Capacidad de iniciar y sostener relaciones placenteras con los demás.

• Conocimiento pleno de sus derechos.

• Inteligencia emocional, es decir, una capacidad sobre el control de las emociones, además de una facilidad para expresarlas.

• Capacidad para construir acuerdos con los demás.

• Reconocimiento de sus necesidades, pero también las de los demás.

 

Pasos que te permitirán construir comunicación asertiva:

 

1. Analiza tu estilo de comunicación.

 

Dentro de los procesos de comunicación podemos encontrar personas que utilizan estilos que pueden o no dar paso a la solución de un conflicto y estos pueden ser:

 

• El agresivo: Este tipo de personas suelen pasar por encima de los derechos de los demás, expresan un tipo de lenguaje verbal y corporal violento. Las principales características son: tono de voz alto y dominante, uso excesivo de manos, con movimientos rápidos y amenazantes, mirada fija y amenazante, argumentos con críticas destructivas, uso de palabras con lenguaje soez, señalar constantemente con el dedo.

• El pasivo: El típico tapete, son aquellos que permiten que los demás pasen por encima de ellos con el fin de pertenecer, evitar problemas, etc. Este tipo de personas regularmente: No saben decir que no, prefieren dar la razón a los demás y evitan dar su opinión, hacen cosas en contra de su voluntad y altamente evasivos.

• El Asertivo: Esta persona conoce y respeta sus derechos y los de los demás, domina su lenguaje verbal, no verbal y actitudinal. Es capaz de expresar sus opiniones, gustos y deseos.

 

   2. Inicia tu comunicación con la palabra “Yo”.

 

La palabra Yo, permite reafirmar lo que piensas, lo que opinas, lo que deseas, lo que sientes y tomas el control de ti mismo.

        

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   3. Aprende a escuchar.

 

¿Alguna vez te has puesto a pensar por qué la vida nos brindo una boca y dos oídos?. Bueno pues, eso quiere decir que siempre escuchemos dos veces primero antes de hablar. El líder comunicador tiene la capacidad de escuchar antes de opinar, además de analizar y ser objetivo en la información que en el momento está recibiendo. 

 

4. Negociación por acuerdos.

 

El  líder es capaz de identificar con efectividad cada elemento que compone al conflicto y comenzar a definir posibles soluciones al mismo, pero con una característica en particular, y es que lo hace bajo el concepto de Ganar – Ganar.

 

La prioridad se encuentra en llegar a acuerdos comunes que permitan que las dos partes obtengan un beneficio y sobre todo que estos acuerdos no se desvíen de los objetivos comunes del área y la propia organización.

 

5. Identifica tus necesidades y busca satisfacerlas.

 

Este elemento podría inclinarse hacia una postura individualista, sin embargo, siempre he creído en la frase “No puedes dar lo que no tienes”, y para poder identificar las necesidades en los demás y satisfacerlas, entonces tenemos que partir en ser capaces de identificar nuestras propias necesidades y satisfacerlas. Está  comprobado que al satisfacer tus necesidades, serás capaz de elevar tu potencial y al mismo tiempo desarrollarás la habilidad de detectar las necesidades en los demás sin necesidad de sacrificar a nadie.

 

6. Aprende a decir que no cuando es necesario.

 

Uno de los problemas en la comunicación más frecuentes en la gente es no saber decir que no cuando es necesario. Y esto sucede comúnmente por temor a ser rechazado o juzgado por no hacer sentir mal a alguien, etc.

 

Saber decir que no en el o los momentos correctos es una de las decisiones de mayor asertividad en el liderazgo de todo gerente, y definitivamente, llevará un mayor potencial cuando ese “No” viene respaldado de argumentos que permitan al interlocutor reconocer la o las justificaciones que respaldan al mismo.

 

7. Apalanca tu pensamiento y argumentos del lenguaje no verbal.

 

Hemos escuchado esta frase trillada “Los gestos valen más que mil palabras”, y es muy cierto, el lenguaje no verbal comunica emociones. De hecho los psicólogos en su proceso de análisis, observan continuamente el lenguaje no verbal de sus pacientes.

 

Utiliza el lenguaje no verbal de tus interlocutores como tu aliado, por ejemplo: mantén siempre contacto visual, utiliza una postura erguida y segura; las manos son una herramienta muy poderosa cuando se saben utilizar, saber cuando cruzar los brazos para marcar persistencia; gesticular funciona muy bien para la persuasión; asentir con la cabeza para empatizar y así podemos utilizar una serie de movimientos que potencien nuestra comunicación.

 

8. Inteligencia emocional.

 

El dominio de esta habilidad te puede garantizar el 50% para ganar una negociación, uno de los problemas más grandes del ser humano. Gobernar tus emociones te colocará en un nivel superior de los demás, guardando equilibrio en el proceso de negociación.

 

09. Reconocer una crítica constructiva hacia ti.

 

Somos seres humanos y como cualquiera podemos cometer errores y provocar conflictos. En la mayoría de los casos, un “Jefe” no reconoce una crítica por parte de un subordinado; al contrario, este somete, anula, utiliza al máximo su jerarquía, pero no es capaz de identificar el agujero que esta cavando, la bomba de tiempo que esta dejando correr, y desafortunadamente lo peor, deja pasar infinidad de veces un sin número de oportunidades para aprender, crecer y cambiar.

 

Comunicación asertiva es no solo afrontar la crítica sino ser capaz de reconocerla y aceptarla, siempre y cuando esta contenga elementos soportados con información fidedigna y amplio criterio de parte del interlocutor.

 

Visualiza el poder que puedes adquirir mostrándote como un líder humilde que reconoce sus fallas y actúa en pro de ser cada día mejor.

 

10. Comunicación sin rodeos.

 

Dentro de la comunicación asertiva entre más clara y concreta es, los resultados los obtendrás con mayor efectividad; además, conducir al interlocutor por un camino sin rodeos te permitirá ahorrar tiempo y esfuerzo.

 

Abrir el canal de comunicación asertivo es expresar de forma directa y clara lo que se busca, como se busca, los alcances que tiene y el beneficio para todos; si dentro del conflicto existe algo que pudiera molestarte, tienes que expresarlo con asertividad, evitando por supuesto los ataques encubiertos o el propio sarcasmo en la conversación.

 

11. Sugerir modificación de conductas.

 

Dentro de tu área de trabajo tienes un mundo en cada cabeza, diferentes formas de pensamiento, cultura, educación, experiencias, etc. con las cuales tienes que lidiar día con día, así como con la conducta y el comportamiento.

 

El arte de la comunicación asertiva se encuentra en cómo persuadir e influir en las modificaciones de conducta.

 

Intentar cambiar la conducta de alguien podría costarte la salud mental y física, sin embargo, solicitar modificar el modo o manera del comportamiento es más viable. Utiliza estos elementos para que alcances a transmitir el mensaje de una forma efectiva:

 

1. Asumir el conflicto.

2. Describir el comportamiento inadecuado.

3. Hacer ver las consecuencias del comportamiento.

4. Expresar tus sentimientos ante el conflicto.

5. Solicita la modificación de la conducta con mucha claridad y respeto.

 

Ejemplo: Alberto, me es muy molesto la forma tan agresiva en la que te diriges con tus compañeros. Esto no solo afecta a la gente con la que te diriges, también me afecta a mi y todos los miembros del equipo; esto impide alcanzar los objetivos que trazamos en conjunto con la efectividad que deseamos, ¿Me puedes apoyar modificando la forma en que te diriges con cada miembro del equipo, por favor?

 

Practica todos los días este proceso con tu familia, con tus amigos, con tus vecinos, en tu trabajo y te darás cuenta que al poco tiempo, dominarás al 100% esta estrategia de solución de conflictos.

 

12. Inspira confianza.

 

Consiste en ser capaz de empoderar a tu interlocutor. Todo líder necesita desarrollar la capacidad de encontrar cada una de las virtudes en los miembros de su equipo de trabajo, reconocer las virtudes y talentos con las que cuentan te permitirá desarrollar una imagen de respeto y confianza.

 

13. Se proactivo ante la agresión.

 

Como bien sabemos el líder proactivo es capaz de anticiparse, evaluar una situación y además reconocer las diferentes opciones para la solución.

 

En este caso siempre existen personas con tal grado de toxicidad interna que no les importa llegar de una forma agresiva ante su interlocutor para sacar ventaja o provecho de alguna circunstancia en particular.

 

Aprende a controla tus emociones negativas que este tipo de personas pueden ocasionar en ti, es decir, no te enganches con su agresión, piensa en que te quieren utilizar como si fueras un bote de basura, posteriormente y como un recurso para controlar la emoción, escucha con toda tu atención las demandas del interlocutor, eso además de controlarte te permitirá analizar todas las opciones posibles para eliminar la agresión en un solo instante. Ya que el interlocutor se haya vaciado tendrás preparada el arma letal y esta es una pregunta que la persona no se espere y la desarme por completo; pero recuerda, es elemental tu capacidad de análisis, síntesis y elección de tu respuesta.

 

Ejemplo:

Persona Agresiva: ¡¡¿Cómo espera buenos resultados si no es capaz de motivar a su propio equipo de trabajo?!!

 

Líder Asertivo: ¿Tu crees que pueda ser capaz de motivar tus resultados cuando me doy cuenta que no reconoces las motivaciones que te esperan en casa?

 

La magia de la comunicación asertiva se desarrolla de adentro hacia fuera, tomando un control emocional interno, anticipándose y visualizando posibles escenarios, tomando el control en todo momento y bajo cualquier circunstancia.