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Blog   /  Padres que Educan con Amor   /   Dispositivos Móviles como Separadores Emocionales...

¿Alguna vez te has puesto a pensar el daño emocional que pudiera causar preferir un dispositivo móvil que atender a tus hijos?

 

Sin lugar a dudas los padres deseamos que nuestros hijos incorporen a sus vidas una serie de valores y principios que les permitan sostener una buena relación en el entorno que les rodea.

 

Como padres hacemos lo mejor para enseñarles acerca del respeto o la honestidad, así como saber compartir con otras personas y hablar con respeto, tanto a adultos, como a niños de su misma edad. Esta labor de formación y desarrollo la fomentamos a diario suponiendo que con el pasar del tiempo estas conductas se convertirán en buenos hábitos y una hermosa disciplina.

 

Sin embargo ¿cuántos de ustedes se han descubierto en conductas incongruentes con lo que pretenden enseñar a sus hijos? o ¿cuántas veces has recibido los reproches de tus hijos porque no predicas con lo que enseñas?

 

Sin duda, una gran cantidad de papas nos hemos dado cuenta que no es tan fácil predicar con lo que decimos y pensamos ¿Cierto?

 

Y por si fuera poco, hace 2 décadas aproximadamente el desarrollo y crecimiento de las tecnologías se han convertido en una verdadera amenaza en la educación de nuestros hijos. De hecho, la amenaza más grande la hemos experimentado en la última década debido al aumento acelerado y la misma disponibilidad de los usuarios de estas tecnologías móviles.

 

La reconocida firma mundial Deloitte desarrolló una exclusiva encuesta a usuarios y consumidores de tecnología móvil denominada “Global Mobile Consumer Survey” por sus siglas (GMCS) en donde arrojan los siguientes datos:

 

- En México el acceso a Smartphones ha registrado un aumento a tasas altas, ya que, en 2018, el 89% de los encuestados tenían acceso a un Smartphone; mientras que en 2019 creció a 92%, convirtiéndose así en el dispositivo más utilizado por los consumidores en el país - 

 

Estos datos nos revelan que no solo ha incrementado la capacidad de acceder a este tipo de dispositivos, sino que el uso de los mismos cada día va en aumento por parte de los usuarios, pasando una gran cantidad de tiempo en aplicaciones como son: Facebook, Instagram, Twitter, YouTube, hoy con una moda en aumento de Tik Tok, entre otras aplicaciones y redes sociales del momento, así como los mismos navegadores de internet.

 

Lamentablemente este uso excesivo de dispositivos móviles, así como de las plataformas a través de las cuales se pueden pasar horas navegando, están amenazando el núcleo de mayor relevancia en cualquier sociedad que es la familia.

 

Así es, el aumento del abandono principalmente en niños aumenta dramáticamente todos los días, afectando directamente en la seguridad emocional de niños y adolescentes en nuestro país y el resto del mundo.

 

Como padres nos cansamos de inculcar una adecuada educación en nuestros hijos pidiéndoles que saluden cuando lleguen a cualquier lugar o que cuando están hablando con alguien más tengan la educación de ver siempre a los ojos como una muestra de respeto y atención a la otra persona, además de exigírselos hacia nosotros mismos ¿verdad?.

 

Pero que complicado se ha vuelto fortalecer esta educación cuando nosotros mismos como padres les hacemos exactamente lo mismo cuando ellos tienen la necesidad de nuestra atención. ¿Te ha sucedido que alguno de tus hijos te hablan y tu te pierdes en el celular perdiendo completamente el sentido del espacio y tiempo a tu alrededor? ¿Te ha pasado exactamente lo mismo con tus propios hijos, pero que la víctima ignorada eres tu mismo (a)?

 

Es de vital importancia que tomes el control de la tecnología y que no sea la tecnología la que tome el control de ti, así como la de tu familia.

 

¿Sabías que…? en el año 2009 se acuñó en Sidney, Australia la palabra “Phubbing” producto de la raíz etimológica por la unión de las palabras pone (teléfono) y snubbing (despreciar), y traducida esta palabra compuesta como “Ningufoneo”,definida de la siguiente manera:

 

“Acto de ignorar a una persona o al propio entorno por concentrarse en la tecnología móvil, ya sea un teléfono inteligente, tableta, PC portátil u otro objeto inteligente” (Descripción extraída de Wikipedia).

 

Tomemos esta conducta como un comportamiento adictivo derivado de diferentes causas como pueden ser la misma evasión de la realidad sustituyéndola por una realidad virtual, distorsión de la propia personalidad así como una disminución de autoestima inclinándose a tendencias depresivas y/o hasta suicidas.

 

Ahora bien, entendamos el factor de riesgo hacia una de las poblaciones de mayor vulnerabilidad que son niños y adolescentes.

 

Por un lado, es indispensable, papás, que avancen a visualizar el daño emocional que pueden ocasionar en sus hijos al caer en esta conducta de Ningufoneo. Parte de la educación que tu y yo recibimos es la misma que tratamos de inculcar a nuestros hijos y ésta es darle toda la atención a las personas que se acercan a nosotros con el fin de comunicarnos algo.

 

Responde a esta pregunta con total sinceridad: ¿Cómo te sentirías si quieres hablar con alguien y esta persona no hace más que ver el teléfono mientras que tu estás hablando?. Con mucha probabilidad experimentarías sentimientos de que la persona te está ignorando y percibirías inmediatamente que no le interesa ni poco lo que estás expresando, probablemente hasta te molestarías y algunas personas seguramente harían la observación a la persona.

 

Si alcanzaste a percibir lo que pudieras sentir o recordaste haberte sentido así alguna vez, me gustaría que ahora pienses que es lo que tu hijo o hija, pequeñitos o adolescentes, llegan a sentir o percibir. Literal en su psicología interna reciben el mensaje como “no le importo a mi mamá”, “no le importo a mi papá, “El teléfono es más importante que yo”, cuando para ellos tu eres quién más cerca deberías de estar de ellos, y sobre todo, en los momentos de mayor relevancia para su crecimiento y desarrollo físico y emocional, ¡que son todos!

 

Lo peor de este asunto es que ellos perciben que el amor de sus padres está limitado al poco tiempo que ellos consideren que pueden brindarles, es como darles migajas de amor de las cuáles comienzan a acostumbrarse.

 

Y por si fuera poco, existen una gran cantidad de papás que no solo enseñan esta conducta con el ejemplo sino que fomentan constantemente el uso desmedido de los dispositivos móviles a sus hijos, convirtiendo esta tecnología en nanas virtuales, desvirtuando completamente la esencia de ser padres que educan con amor, atención y afecto, provocando una gran confusión en el desarrollo psicológico de sus hijos así como un gran efecto negativo en su autovaloración y autoestima.

 

De no tomar conciencia del uso desmedido que como padres tengamos sobre el uso de dispositivos móviles, el daño colateral a mediano plazo será el de unos hijos que desarrollarán la misma adicción. El núcleo familiar se verá deteriorado en los lazos afectivos y de comunicación, la importancia de permanecer en familia perderá por completo el principio de su valor, probablemente tus hijos buscarán aquellos grupos o personas que si les brinden esta atención, y en muchos casos, son grupos o personas involucradas en la misma situación y resguardadas en otro tipo de adicciones como el alcohol o la drogadicción.

 

Sabemos perfectamente bien que las tecnologías cuentan con un gran número de bondades y beneficios, pero que se pueden convertir en los enemigos internos en nuestros hogares si no sabemos utilizarlos adecuadamente así como orientar a los que más amamos que son nuestros hijos en el uso correcto de los mismos.

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Por: Omar Cortés

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